Da vinci ilustracion
Una obra de arte de Leonardo da Vinci hace historia en una subasta de Christie’s
El hombre de Vitruvio (en italiano: L’uomo vitruviano [ˈlwɔːmo vitruˈvjaːno]; originalmente conocido como Le proporzioni del corpo umano secondo Vitruvio, lit. ‘Las proporciones del cuerpo humano según Vitruvio’) es un dibujo realizado por el polímata italiano Leonardo da Vinci en torno a 1490[1] que va acompañado de notas basadas en la obra del arquitecto romano Vitruvio. El dibujo, realizado en tinta sobre papel, representa a un hombre en dos posiciones superpuestas con los brazos y las piernas separados e inscritos en un círculo y un cuadrado.
El dibujo representa el concepto de Leonardo sobre las proporciones ideales del cuerpo humano. Su inscripción en un cuadrado y un círculo procede de una descripción del antiguo arquitecto romano Vitruvio en el libro III de su tratado De architectura. Sin embargo, como se ha demostrado, Leonardo no representó las proporciones de los miembros de Vitruvio, sino que incluyó las que encontró él mismo tras medir a modelos masculinos en Milán[2]. Aunque el dibujo lleva el nombre de Vitruvio, algunos estudiosos cuestionan hoy la idoneidad de tal título, dado que se utilizó por primera vez en la década de 1490[2][página necesaria].
Las 10 mejores obras de arte de Leonardo da Vinci – Relajante
Muchos historiadores y estudiosos consideran a Leonardo como el principal ejemplo del “genio universal” o “hombre del Renacimiento”, un individuo de “curiosidad insaciable” y “febril imaginación inventiva”, y se le considera uno de los individuos con más talento que jamás haya existido. Según la historiadora del arte Helen Gardner, el alcance y la profundidad de sus intereses no tienen precedentes en la historia, y “su mente y su personalidad nos parecen sobrehumanas, mientras que el hombre mismo es misterioso y remoto”. Marco Rosci señala que, aunque se especula mucho sobre su vida y su personalidad, su visión del mundo era más lógica que misteriosa, y que los métodos empíricos que empleaba eran poco ortodoxos para su época.
Nacido fuera del matrimonio de un notario, Piero da Vinci, y una campesina, Caterina, en Vinci, en la región de Florencia, Leonardo se educó en el taller del renombrado pintor florentino Andrea del Verrocchio. Gran parte de su vida laboral la pasó al servicio de Ludovico el Moro en Milán. Posteriormente trabajó en Roma, Bolonia y Venecia, y pasó sus últimos años en Francia, en la casa que le concedió Francisco I de Francia.
Mona Lisa (versión abreviada) de Leonardo da Vinci: gran arte
Aunque Leonardo da Vinci es más conocido como artista, su trabajo como científico e inventor lo convierten en un verdadero hombre del Renacimiento. Sirve de modelo para aplicar el método científico a todos los aspectos de la vida, incluidos el arte y la música. Aunque es más conocido por sus dramáticas y expresivas obras de arte, Leonardo también llevó a cabo docenas de experimentos cuidadosamente pensados y creó inventos futuristas que fueron innovadores para la época.
Su aguda mirada y su rapidez mental le llevaron a realizar importantes descubrimientos científicos, aunque nunca publicó sus ideas. Era un vegetariano que amaba a los animales y despreciaba la guerra, pero trabajó como ingeniero militar para inventar armas avanzadas y mortales. Fue uno de los mejores pintores del Renacimiento italiano, pero sólo dejó un puñado de cuadros terminados.
Leonardo buscó un lenguaje universal en la pintura. Utilizando la perspectiva y sus experiencias con la observación científica, Leonardo trató de crear representaciones fieles de la vida. Este llamamiento a la objetividad se convirtió en la norma para los pintores que le siguieron en el siglo XVI.
Pinturas del Renacimiento
Leonardo ha sido descrito a menudo como el arquetipo del “hombre del Renacimiento”, un hombre cuya curiosidad aparentemente infinita sólo era igualada por su capacidad de invención. Se le considera uno de los mejores pintores de todos los tiempos y quizá la persona con más talento que haya existido jamás.
Leonardo era y es conocido sobre todo como pintor. Dos de sus obras, la Gioconda y La última cena, ocupan posiciones únicas como los retratos y pinturas religiosas más famosas, más reproducidas y más parodiadas de todos los tiempos, y su fama sólo se aproxima a la de La creación de Adán de Miguel Ángel. El dibujo del Hombre de Vitruvio de Leonardo también es un icono. Se conservan unos quince cuadros suyos, cuyo número es reducido debido a su constante, y a menudo desastrosa, experimentación con nuevas técnicas, y a su procrastinación crónica. Sin embargo, estas pocas obras, junto con sus cuadernos de notas, que contienen dibujos, diagramas científicos y sus reflexiones sobre la naturaleza de la pintura, constituyen una contribución a las generaciones posteriores de artistas sólo comparable a la de su contemporáneo Miguel Ángel.